Antisemitismo Mundial

 La otra cara de la moneda y el boicot económico y político

En los últimos tiempos somos testigos atónitos de un resurgimiento del antisemitismo en varios países del mundo. Después de la Segunda Guerra Mundial y del Holocausto Judío, hemos pensado que nunca esta actitud puede surgir de nuevo, mas, en la virulenta forma que se manifiesta en la actualidad. La memoria política e histórica del mundo y de las naciones era el escudo y la bandera que lo  imposibilitaba de levantar cabeza (antisemitismo) de nuevo.

El Imperio Romano, después de tres largas y sangrientas guerras hizo un solo gran favor al pueblo judío: los esparció en todo el mundo, sentando semillas de la civilización judeo en casi cada país del mundo. Relativamente, hoy estamos a salvo. Será imposible que alguna voluntad de un país, gobernante o grupo terrorista, que piensa en erradicar de nuevo al pueblo judío, lo pueda hacer. Nadie tiene la logística y los medios físicos para llegar a cada una (comunidad) debido a la misma fragmentación de las comunidades judías vivas y prosperas alrededor del mundo.

Parece que el antisemitismos no fue eliminado con el desentierro de los Judíos de España. Que no murió con la derrota de Francia, Alemania y Austria en la Segunda Guerra Mundial. Que sigue viva, decenios mas tarde y que no se esfumo después del gobierno de Perón en Argentina.

El antisemitismo pan-árabe–musulmán puede ser entendido porque estamos en estado técnico de guerra con varias naciones árabes-musulmanes y en una guerra abierta con  una minoría terrorista del pueblo palestino. Pero no estamos en guerra con Francia, Argentina, España, Bélgica, Italia, Austria, Alemania, Polonia, Hungría, Chile, Brasil, y otros países donde grupos y organizaciones proyectan el antisemitismo. En varias de las Ex–Republicas Soviéticas, donde sus comunidades judías han sido exterminadas en la Segunda Guerra y después, paulatinamente, han desaparecido, ya no hay antisemitismo local.

Ningún gobierno legalmente constituido (u no), nunca (con excepción a Alemania Nazi y sus satélites durante la Segunda Guarra; debemos mencionar a Japón que no correspondió, en este asunto, con el Tercer Reich) va a reconocer que es antisemita. Solo que sus súbitos tiene libertad de opinión y acción para manifestar su actitud antisemita de diferentes formas, desde pacificas y pasivas hasta libre agresión, asesinatos y pogroms.

El antisemitismo es como un virus que se puede propagar en la mente de cada persona que interactúa con los agentes del anti-semitismo mundial y local. Este virus debe ser detectado, parado y destrozado. La conferencia sobre el Antisemitismo Global que fue organizada en New York entre 30 de octubre y 1-ro de noviembre por la Anti-Defamation Leage (ADL) fue un gran paso en la dirección correcta.

Tenemos una nueva tarea. Cada uno de nosotros (We, The People…) puede hacer tres cosas sencillas en contra del antisemitismo:

1. No comprar bienes y servicios de los países que patrocina el antisemitismo, tanto del estado, como de empresas  particulares. Les aseguro que podemos vivir al mismo estándar sin comprar perfumes, quesos, ropa, carros y otros bienes hechos en Francia y viajar a Paris. Sin  comprar productos hechos en Italia, Bélgica, España, Argentina, Austria, etc. Sus libros de historia deben ser reescritos y la actitud de sus gobernantes debe cambiar antes que el boicot judío a sus productos y sus industrias  cese.
2. Ser concientes de la actitud de los gobernantes y de la población de estos países, denunciar cada acto de antisemitismo y divulgar la verdad detrás de los hechos: en voz alta, clara y sin miedo.
3. Dejar de vivir en estos países. El aporte judío a la cultura y la economía de Francia y Alemania es inmensamente más grande que el aporte galo y alemán a  la cultura y vida económica israelí. El mismo caso es con Bélgica, Austria, Argentina, Chile, España, Italia, Suiza y otros. Cuantos  laureados del premio Nóbel de origen Judío han vivido y viven en estos países?  ¡M u c h o s ! ¡D e m a s i a d o s! Deportistas, médicos, ingenieros, profesores universitarios, pintores, escritores, música, artesanos, constructores, actores, banqueros, trabajadores.

Lo que debemos hacer ahora lo debemos hacer ahora. Mañana será tarde. Nadie nos va a defender. Solo nosotros nos debemos defender y luchar con dignidad. Como cada pueblo en la historia. ¡La asimilación no es la respuesta!

Nos me van a responder que podremos recibir la ira de estos pueblos. ¡No tengan miedo! En casi 6.000 años de historia hemos recibido la ira de todos los pueblos. Unos (muchos) han desaparecido olvidados en las páginas de la historia, otros siguen.

¿Pero no hemos sufrido la ira de tantos pueblos e imperios: Asirios, Babilonianos, Egipcios, Imperio Romano, Imperio Español, Imperio Ruso, El Tercer Reich, y ahora el Mundo Musulmán?

 ¿Puede algo mas grave y terrible que  Kristallnacht Progrom , Aktion Reinhard (campaña en contra de los Judíos polacos), de los masacres de Gardelegen, Bialystok, Gasrden, Polonia, Minsk, Lomazy, Koskowola, Lukow, Poniatowa, Riga, Uscilung, Warsaw, Lipowa, de los campos de exterminio de Auschwitz-Birkenau, Majdanek, Buchenwald, Sobibor, Chelmno, Treblinka, Bobi Yar, Cracovia, Dachau, Belzec, Bergen-Bersen, Sachsenhausen, los Batallones de la Policía Militar Nazi–Einsatzgruppen, y de las marchas de la muerte en Polonia, Hungría, Rumania, Rusia, Checoslovaquia, Alemania nazi, Austria, puede pasar mas al pueblo Judío?

Si hemos pasado esta prueba, podemos hoy hacer un boicot de los productos y  servicios de los países que hoy son antisemitas. Países que ni tienen y no han tenido en sus historias ninguna justificación o causa en contra de los judíos. Porque por donde pasamos traemos solo prosperidad, cultura y justicia.

 Esta es mi opinión, y puede que no todos estén de acuerdo con ella.

Nota: En el 2003, unos empresarios de origen musulmán de Francia han adoptado una método sui-generis de boicot: ver el caso de la Mecca Cola, que ha vendido mas de 2.000.000 botellas a cliente musulmanes en el país galo. Una respuesta fuerte, dicen ellos, al acoso americano y occidental a su cultura.

Publicado en Diciembre 2002, Caracas, Venezuela